martes, 24 de abril de 2012

Pentecostés

Pentecostés
Tu Devocional
240412

“Pues si vosotros, siendo malos, sabéis dar buenas dádivas a vuestros hijos, ¿cuánto más vuestro Padre celestial dará el Espíritu Santo a los que se lo pidan?”  (Lucas 11:13 VRV)
Desde el Día de Pentecostés el Espíritu Santo es dado a todos los creyentes.
“Y estando juntos, les mandó que no se fueran de Jerusalén, sino que esperasen la promesa del Padre, la cual, les dijo, oísteis de mí”.
(Hechos 1:4)
De esta promesa del Padre les había hablado Cristo una y otra vez cuando les decía que les sería enviado un Consolador.

“He aquí, yo enviaré la promesa de mi Padre sobre vosotros; pero quedaos vosotros en la ciudad de Jerusalén, hasta que seáis investidos de poder desde lo alto”. (Lucas 24:49)
En vano tratará un predicador o un misionero de impactar con sus mensajes si antes no ha sido revestido de este Poder del Espíritu.

“Porque la ley del Espíritu de vida en Cristo Jesús me ha librado de la ley del pecado y de la muerte”. (Romanos 8:2)
La actividad del Espíritu Santo en la vida de un creyente está regulada como una ley pero no está mecanizada porque es vida.

”a quienes Dios quiso dar a conocer las riquezas de la gloria de este misterio entre los gentiles; que es Cristo en vosotros, la esperanza de gloria”, (Colosenses 1:27)
El Secreto, conocido solamente por revelación divina, de Cristo en la vida del creyente.

Dios Nos Bendiga
H. Ignacio Uranga

Tu Devocional Diario es enviado por: Ministerio Internacional de Divulgación.
Correo Electrónico: minintdiv@gmail.com

No hay comentarios:

Publicar un comentario