El nos Cuida
Tu Devocional
290212
“echando toda vuestra ansiedad sobre él, porque él tiene cuidado de vosotros.” (1 Pedro 5:7 VRV)
Amados Hermanos y Amigos:
Con frecuencia nosotros estamos llenos de preocupación y ansiedad ante el acelerado ritmo de nuestro mundo actual. Pero pensemos que la
preocupación es lo opuesto a la fe.
Cristo Jesús, dijo: “Por tanto os digo: No os afanéis por vuestra vida, qué habéis de comer o qué habéis de beber; ni por vuestro cuerpo, qué habéis de vestir. ¿No es la vida más que el alimento, y el cuerpo más que el vestido?
Cristo Jesús, dijo: “Por tanto os digo: No os afanéis por vuestra vida, qué habéis de comer o qué habéis de beber; ni por vuestro cuerpo, qué habéis de vestir. ¿No es la vida más que el alimento, y el cuerpo más que el vestido?
Mirad las aves del cielo, que no siembran, ni siegan, ni recogen en graneros; y vuestro Padre celestial las alimenta. ¿No valéis vosotros mucho más que ellas? Y por el vestido, ¿por qué os afanáis? Considerad los lirios del campo cómo crecen: no trabajan ni hilan; pero os digo, que ni aun Salomón con toda su gloria se vistió así como uno de ellos”. (Mateo 6:25-26; y 28-29)
Por tanto, hermano, sabe que Dios está siempre contigo y no hay razón para preocuparse de lo que pueda llegar a pasar. Escrito está: “Así que, no os afanéis por el día de mañana, porque el día de mañana traerá su afán. Basta a cada día su propio mal. Por nada estéis afanosos, sino sean conocidas vuestras peticiones delante de Dios en toda oración y ruego, con acción de gracias.
Por tanto, hermano, sabe que Dios está siempre contigo y no hay razón para preocuparse de lo que pueda llegar a pasar. Escrito está: “Así que, no os afanéis por el día de mañana, porque el día de mañana traerá su afán. Basta a cada día su propio mal. Por nada estéis afanosos, sino sean conocidas vuestras peticiones delante de Dios en toda oración y ruego, con acción de gracias.
Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará vuestros corazones y vuestros pensamientos en Cristo Jesús”.
Amén. (Mateo 6:34; Filipenses 4:6,7)
“Y la paz de Dios gobierne en vuestros corazones, a la que asimismo fuisteis llamados en un solo cuerpo; y sed agradecidos”. Amén.
“Y la paz de Dios gobierne en vuestros corazones, a la que asimismo fuisteis llamados en un solo cuerpo; y sed agradecidos”. Amén.
(Colosenses 3:1)
Dios Nos Bendiga
H. Ignacio Uranga
Dios Nos Bendiga
H. Ignacio Uranga
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