Para Redimirnos
Tu Devocional
270613
“¿cuánto más la sangre de Cristo, el cual mediante el Espíritu eterno
se ofreció a sí mismo sin mancha a Dios, limpiará vuestras conciencias de obras
muertas para que sirváis al Dios vivo?” (Hebreos
9:14 VRV)
Amados Hermanos y Amigos:
La Escritura nos enseña que
Cristo vino a ser a un mismo tiempo, el sacerdote oficiante y el cordero para
el sacrificio.
Escrito está, “quien se dio a sí mismo por nosotros para redimirnos de toda iniquidad
y purificar para sí un pueblo propio, celoso de buenas obras”. (Tito 2:14)
Redimir es poner en libertad a un cautivo mediante el
pago de un rescate; el precio fue la
sangre de Cristo.
“Y hará traer Aarón el becerro de la expiación que es suyo, y hará la
reconciliación por sí y por su casa”. (Levítico 16:6)
Cristo no siguió el modelo
aarónico, pues Aarón, como todos los sacerdotes, debía ofrecer un sacrificio
por sus propios pecados y Cristo fue sin
mancha.
“pero Cristo, habiendo ofrecido una vez para siempre
un solo sacrificio por los pecados, se ha sentado a la diestra de Dios,” (Hebreos 10:12)
Los sacerdotes hacían ofrendas reiteradas, a diferencia de
un solo sacrificio que es para siempre.
“El que no escatimó ni a su propio Hijo, sino que lo
entregó por todos nosotros, ¿cómo no nos dará también con él todas las cosas?”
(Romanos 8:32)
“Nos dará significa conceder
por gracia.
Dios Nos Bendiga
H. Ignacio Uranga
Tu Devocional Diario es
enviado por: Ministerio Internacional de Divulgación.
Correo Electrónico: minintdiv@gmail.com
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